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lunes, 3 de noviembre de 2014

Sobre sefardíes.




"Es la llave de nuestra casa de Toledo. Es lo único que pudimos llevarnos esa horrible noche".  

Adío, adío Kerida, no kero la vida, me la amargates tu. Va, bushkate otro amor, aharva otras puertas, aspera otro ardor, ke para mi sos muerta...
Las frases pertenecen a la canción tradicional Adio Kerida que interpreta la cantante Montserrat Franco. Están escritas en ladino, un idioma derivado del castellano medieval que aún hablan en las comunidades sefardíes de todo el mundo los descendientes de los judíos que vivieron en la península ibérica hasta su expulsión en 1492. Ese año, los reyes católicos ordenaron la marcha de todos los que no se convirtiesen a la fe cristiana.


El Consejo de Ministros, en junio 2.014,  ha dado luz verde definitiva al proyecto de ley que facilita la obtención de la nacionalidad española a los sefardíes, descendientes de los judíos expulsados de España en 1492. La ley —anunciada en 2012, aprobada en primera vuelta hace cuatro meses y que debe pasar aún por Congreso y Senado— permitirá a los judíos de origen sefardí, vivan donde vivan, adquirir casi directamente la nacionalidad española, y mantener al tiempo la suya de nacimiento. Es difícil saber cuántos beneficiarios potenciales hay, porque no existe un registro de sefardíes en el mundo. Fuentes del Gobierno calculan, en una estimación inicial, que atenderán unas 90.000 solicitudes en los cuatro años que durará este plan especial de nacionalidad para sefardíes.

Un poco de historia.

El término sefardí se aplica a los descendientes de los judíos expulsados de la Península Ibérica a finales de la Edad Media, que en su diáspora formaron comunidades en diversos países de Europa, el Mediterráneo Oriental y el Norte de África.
Puede considerarse que la diáspora sefardí empieza ya a finales del siglo XIV, cuando la oleada de asaltos a juderías y matanzas de 1391 –y las subsiguientes conversiones forzadas— impulsaron al exilio a un cierto número de judíos, que se refugiaron mayoritariamente en las comunidades judías que ya existían en el Norte de África.
La expulsión de los judíos de Castilla y Aragón por los Reyes Católicos en 1492 arrojó fuera de estos reinos  a un contingente de cerca de cien mil judíos, que fueron a asentarse en algunos lugares de Europa (Italia, el sur de Francia o Portugal), en el reino de Marruecos, o en las tierras del Mediterráneo Oriental que pertenecían al entonces pujante y extenso imperio otomano. En 1497 se expulsa a los judíos del reino de Navarra.
A raíz del matrimonio del rey don Manuel I de Portugal con la infanta Isabel de Castilla, hija de los Reyes Católicos, en 1497 se decretó la expulsión de los judíos de Portugal, que al final no se ejecutó como tal expulsión, sino que se concretó en una masiva conversión forzada en 1498. Muchos de los convertidos (cristãos novos o cristianos nuevos) matuvieron a escondidas la práctica de la religión de sus mayores, cosa que fue posible en gran medida porque en Portugual no actuó la Inquisición hasta 1540.
Estos conversos criptojudíos (con frecuencia llamados despectivamente marranos) fueron, a su vez, el germen de comunidades sefarditas en los Países Bajos, en Inglaterra, en Hamburgo, en ciudades italianas como Ferrara o Ancona, o en las colonias portuguesas y holandesas de América; a lo largo de los siglos XVI y XVII, algunos conversos abrazaron abiertamente el judaísmo y se integraron en las comunidades sefarditas de Marruecos o del Oriente Mediterráneo.
Con frecuencia el proceso de emigración y formación de las comunidades de la diáspora sefardí fue complejo y duró años o incluso generaciones, y no sólo por las condiciones en que se hacían los viajes en aquella época, sino porque era frecuente que un individuo o una familia itinerase de un país a otro hasta asentarse definitivamente.

Seguidamente, reproduzco del digital Republica.com  un interesante artículo del General Juan Chicharro sobre este asunto:


No es sencillo analizar con acierto lo que sucede en Oriente Medio. A lo largo de diversos artículos es algo que con cierta osadía he intentado en más de una ocasión. Mis relatos tenían un fundamento de garantía pues se basaban en datos proporcionados por un buen amigo israelí, militar, al que tuve ocasión de conocer con motivo de una reunión de Comandantes Generales de Infantería de Marina de diferentes países que tuvo lugar en Washington en el año 2008.Yo era el único español en esa conferencia por lo que mi extrañeza fue grande cuando me comunicaron que había otro en la misma, algo imposible de todo punto. Le pregunté a mi interlocutor quién era ese otro General al que se había referido como español con intención de deshacer el equívoco. Amablemente me señaló a un General que resultó ser un Oficial israelí. Me acerqué a él y le pregunté al efecto sobre la cuestión.Su respuesta fue sorprendente: claro que era israelí pero de ascendencia sefardí y por lo tanto español como yo mismo. De ahí nació una amistad que ha perdurado hasta nuestros días si bien en estos momentos con el contacto perdido.Apenas meses después tuve ocasión de trasladar personalmente esta anécdota a Mauricio Hachuel a la sazón en esos momentos presidente de la Comunidad Sefardí en España. Mauricio me trasladó aspectos interesantísimos del devenir de su familia. En primer lugar sobre su apellido que en el Reino Unido es conocido como Hatchwell así como de su estancia en Marruecos. Hachuel, me explicó, no es otra cosa que el nombre de un pueblo de Jaén o Córdoba de donde era originaria su familia en España antes de la expulsión de los judíos. Me ratificó su españolidad con la salvedad evidente de haber pasado por una ausencia de 500 años fuera de España. Esta aseveración me impactó y me hizo recordar a mi amigo israelí, hoy desaparecido, antes citado, que se había expresado de forma parecida, también. No fue menor mi sorpresa cuando Mauricio, sabedor de lo que me decía, me comentó, a propósito de la expulsión decretada por Isabel la Católica en 1492, que no es del todo cierto el desastre que sufrió Castilla como efecto de la salida de los judíos de España. Su argumento era que en esa fecha Castilla y Aragón tenían una población aproximada de 10 millones de los que unos 1 millón eran judíos y se calcula que fueron unos 100.000 de éstos los que realmente partieron; o sea, que se quedaron en España, convertidos, unos 900.000. Es decir la mayor parte de ellos.Esto quiere decir que hoy, de los 45 millones de españoles que somos no menos de 5 millones proceden de aquellos judíos de entonces. Una cifra significante. Son muchos los apellidos que aún hoy nos lo manifiestan de forma indubitada.Las dos anécdotas expuestas, la de mi amigo militar y la de mi conocido Mauricio, son las que me han llevado a escribir estas líneas como consecuencia de la Ley que entró en vigor el año pasado y que permite a los judíos sefardíes obtener la nacionalidad española. Una Ley reiterativa por más señas pues ya existía una de la época de Primo de Rivera que ahondaba en lo mismo y que no estaba derogada.En un artículo publicado no hace mucho en El Correo Gallego el columnista Torcuato Labella describe muy bien la situación presente demostrando como España ejerció una defensa activa durante la II Guerra Mundial en auxilio de los perseguidos implacablemente por el régimen nazi. Sus ejecutores fueron diplomáticos conocidos pero, le pese a quien le pese, con el amparo y aquiescencia del General Franco.Por otro lado soy testigo directo de las declaraciones explícitas del apoyo y protección que nuestros soldados de la División Azul prestaron a los judíos a su paso por Polonia y los países bálticos.Recojo como prueba de cuanto digo lo manifestado por el que fuera Embajador en España de Israel Salomón Ben Ami y por el que fuera asimismo premio Nobel de La Paz Elie Wiezel al respecto:“El único país de Europa que de verdad echó una mano a los judíos fue España que salvó más judíos que todas las democracias juntas”. “España fue el único país de Europa que no devolvió nunca a los refugiados judíos”.Destaca muy acertadamente también Labella, su incomprensión al hecho de cómo ha trascendido en la historia la expulsión de los judíos de España mientras que apenas se destaca la misma acción en Francia o Inglaterra en 1182 y en 1290. Tal vez sea necesario recordar que en el siglo XVI, por ejemplo, todos los soberanos europeos exigían a sus súbditos practicar su religión y que en Inglaterra, sin ir más lejos, no se reconoció derecho alguno a los católicos hasta el siglo XIX.La explicación a este hecho hay que buscarla en la persistente leyenda negra que desde hace siglos mancha nuestra historia y que pervive incluso sobre hechos presentes. Incluso nuestra propia política actual se ve afectada en muchos aspectos por complejos autóctonos afectados por dicha maldita leyenda. Claro que no se puede pedir peras al olmo. La cultura no es el fuerte de nuestra clase dirigente.No sé por dónde andará mi amigo israelí, el militar, ya que Mauricio murió, pero ya me gustaría conseguir su presencia entre nosotros para que diera luz a tanta mentira y tergiversación que escuchamos tan a menudo.
F.J.de C.
Madrid, 2 de noviembre de 2.014


martes, 9 de abril de 2013

Corea del Norte


Seguidamente reproduzco del digital www.republica.com el interesante artículo del General Chicharro en el que nos expone con su claridad habitual la peligrosa situación que se está viviendo en Corea.
Como información complementaria a dicho artículo acompaño una infografía que representa gráficamente hasta dónde pueden llegar los misiles de Corea del Norte
A propósito de Corea del Norte
La retórica bélica a la que nos tiene acostumbrados Corea del Norte desde hace décadas ha alcanzado en las últimas semanas rasgos preocupantes; sobre todo desde la consciencia de que se trata de un país con capacidad nuclear. Las últimas amenazas de convertir Seúl y Washington en un mar de fuego, la de declararse en estado de guerra con su vecino del sur, declarar nulo el armisticio de la guerra de 1950 así como restablecer un antiguo reactor de plutonio y aumentar el enriquecimiento de uranio son algunas de las “perlas” que Pyongyang ha lanzado últimamente.Por extraño que parezca, y pese a que las apariencias nos muestran la posibilidad de un conflicto inminente, la realidad cotidiana en Corea del Sur permanece inalterable tal que si la crisis actual fuera tan sólo un capítulo más en la larga historia de confrontaciones entre los países vecinos. Nos hemos asustado más nosotros que ellos.En cualquier caso y al contrario que Corea del Norte que, al margen de la retórica de guerra, no ha mostrado hasta el momento ningún movimiento militar “in crescendo”, los EEUU y Corea del Sur sí que lo están haciendo.En efecto, en el transcurso de las maniobras anuales que ambos países realizan, los EEUU están llevando a cabo una medida demostración de fuerza con el empleo de los superbombarderos B-52, el despliegue de F-22,s , el de varios B-2 stealth en vuelo directo desde los EEUU, un submarino nuclear de ataque, el posicionamiento del destructor “USS MC CAIN” ( de la clase Aegis para la defensa antimisiles) y el traslado desde Pearl Harbor de una plataforma naval especifica dotada de un sistema radar de última tecnología a la costa coreana. Todos estos movimientos son síntomas claros que Obama se toma en serio la amenaza norcoreana. Ha desplegado frente a ella medios dotados con la tecnología militar más avanzada del mundo.Y es que pese a que las amenazas norcoreanas son habituales en el tiempo, la posesión del arma nuclear marca un giro importante en el desarrollo de las mismas.Las armas las carga el diablo. Y es tal el grado de desesperación de un régimen donde la población se muere de hambre que todo es posible en una zona del mundo dirigida por mandatarios cercanos a la paranoia. Y esta es sin duda la posición del joven líder Kim Jong que se está metiendo en un callejón sin salida con tal de ganarse la confianza de los veteranos generales de su ejército.La cuestión es que Corea del Sur no se amilana y responde con firmeza a las amenazas de su vecino al tiempo que tiende la mano al norte ofertándole ayuda a cambio de que cese y congele la amenaza nuclear.En toda la crisis subyace, entre los analistas conocedores de la situación, la sensación de que no ha de tardar el momento en que Corea del Norte destape lo que realmente quiere y que no es otra cosa que ayuda alimentaria así como conversaciones directas con los EEUU.Veremos. Pero el juego es muy peligroso.Al mismo tiempo nos encontramos, de una parte, que uno de los actores históricos en la zona como China se desliga de su tradicional apoyo a Corea del Norte e incluso suscribe las recientes sanciones de la ONU con motivo de las últimas pruebas nucleares; y de otra está nada menos que Japón.¿Qué pasa con Japón?Pues sencillamente que ahonda en sus relaciones con los EEUU; sin embargo en el último informe de “la Revisión Estratégica en Asia para el 2013″, que el Instituto de Defensa japonés ha emitido, se apela a revisar profundamente las líneas de actuación y programas de la defensa para hacer frente a la amenaza nuclear norcoreana y a la creciente modernización militar de China. En definitiva, incremento del presupuesto para la fuerza de autodefensa y en concreto para dotarse de una capacidad anfibia y potenciar la ya potente fuerza aérea. O sea, Japón confía en el paraguas norteamericano pero por si las moscas se arma.Como vemos la situación en el lejano oriente dista mucho de ser tranquila y reposada.Al menos hay alguna buena noticia y esta no es otra que la aceptación por parte de China de participar el año que viene en las maniobras bienales “RIMPAC 2014″. Estas maniobras son los ejercicios navales más grandes del mundo y que lideran evidentemente los EEUU.La participación de la Armada China en estos ejercicios constituyen un hito de importancia para el entendimiento entre los dos grandes colosos del pacifico y cobra una gran importancia en los momentos actuales.Seguro que a Corea del Norte no le ha gustado en absoluto esta disposición de su antiguo aliado a colaborar con los EEUU.
Juan Chicharro
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martes, 23 de julio de 2013

Confusión en Oriente Medio


El término "primavera árabe" ha dado paso a la más pesimista noción de "invierno islamista" a medida que los acontecimientos no se desarrollaban como nosotros esperábamos o los frutos de los cambios se alejaban de lo que queríamos para los países de la zona. La intervención de la OTAN en Libia que acabó con Gaddafi no sólo generó una situación caótica en ese país sino que nutrió de armamento a los terroristas de toda la región provocando una ulterior intervención militar en Mali para frenar los avances de los jihadistas; las protestas en Bahrein acabaron con la ocupación militar por parte de Arabia Saudí del pequeño país; Yemen se hundía en un conflicto intratable que volvía al país en una zona de nadie de la que se aprovechaban los grupos afiliados a Al Qaeda; Egipto avanzaba a la bancarrota bajo un presidente de Los Hermanos musulmanes; y Siria se desangraba en una terrible guerra civil donde los jihadistas pasaban a formar el grueso de la rebelión contra el régimen de Basher el Assad. Las transiciones pacíficas dejaban de serlo y allí donde los procesos electorales acababan en elecciones libres, el islamismo arrasaba .(cfr. GEES, http://www.gees.org/Rafael L. Bardají).

En este complicado escenario en el que miden sus fuerzas potencias como Israel y estados como Siria, Egipto, y los USA siempre vigilando la actitud de los diversos protagonistas y  a quienes preocupa y disgusta enormemente muchas actuaciones tanto de los estados musulmanes como de u aliado Israe; por ello me complace reproducir el siguiente artículo del General Chicharro, comentarista siempre muy bien informado:

Confusión en Oriente Medio

martes, 10 de septiembre de 2013

Siria, armas químicas y confusión.

Una vez mas reproduzco del digital www.republica.com un artículo del General Chicharro; en esta ocasión aborda el el tema de Siria y las armas químicas, con su habitual buen sentido y profundo conocimiento de los temas de Defensa e Inteligencia.

El conflicto de Siria es particularmente difícil de entender para los simples lectores y consuela leer que el mismo autor afirme:

“….No lo sé y nada tiene de raro que así sea, pero cómo lo voy a saber si las dudas están en todas partes…..”



Espero poder contribuir con este artículo a que por lo menos lleguemos a la sabia conclusión  socrática “solo se que no se nada”


F.J.de C.



A propósito de Siria y las armas químicas



Si hay algo que yo destacaría de la situación actual en Siria es ante todo la confusión y el exceso de verborrea imperante en algunos dirigentes del mundo occidental. A todos se les calienta la boca cuando de proclamar acciones se trata para luego a la hora de la verdad recular con descaro. Tal es el caso del Presidente Obama que hace año y medio advirtió a Al Assad que el empleo de armas químicas supondría la intervención inmediata de los EEUU en el conflicto y ahora semanas después de consumada la felonía aún duda respecto al ataque en cuestión. Lo peligroso de advertir y establecer líneas rojas no cumpliendo lo dicho supone un grave descrédito y pérdida de credibilidad que sirve como precedente en otros conflictos. Por ejemplo, a propósito del programa nuclear iraní.Claro que todo esto puede ser comprensible si se tienen dudas sobre la autoría de los que ordenaron el empleo de armas químicas el pasado día 21 de agosto. Según las fuentes de inteligencia occidentales la orden partió del régimen de Al Assad; sucede que a pesar de las posibles pruebas en ese sentido la lógica o el sentido común apuntan al sinsentido de esta premisa. ¿Qué necesidad tenía Al Assad de emplear este tipo de armas cuando su dominio de la situación es cada vez mayor y es consciente de las posibles repercusiones que su empleo podría acarrear? Este tipo de armas pueden tener su “lógica” cuando la situación es desesperada pero no parece ser este el caso presente. Y además sucede también que se emplearon en las afueras de Damasco donde se encuentra el ejército sirio desplegado. No, no parece tener sentido. Y ello es lo que seguramente valoran los líderes occidentales en estos momentos y lo que ha parado lo que en algún momento se suponía un ataque seguro. No lo sé y nada tiene de raro que así sea, pero cómo lo voy a saber si las dudas están en todas partes.Por otro lado la perplejidad de la situación general en la zona raya en el esperpento. Tenemos de una parte al régimen sirio y de la otra nada menos que a un conglomerado de facciones lideradas, controladas y dirigidas por Al Qaeda. Desde luego no veo que el hipotético triunfo de esta oposición sea nada bueno para Occidente. Sin embargo nos encontramos a los EEUU y a Francia apoyándoles y listos a lanzar un ataque contra el régimen sirio. Un ataque que ahora llaman limitado y simplemente de advertencia.La finalidad del posible ataque, no obstante, sería según Obama “degrade Assadupgrade the opposition“, es decir, fortalecer a Al Qaeda debilitando a Al Assad. Habrá que esperar para comprender el sentido de todo esto, hoy por hoy para mí incomprensible.Vayamos ahora a analizar el “origen” de esta crisis presente. Me refiero a la derivada del empleo de las armas químicas. Menudo revuelo se ha organizado.Las armas químicas están consideradas como armas de destrucción masiva y su producción y almacenamiento prohibidos por la ONU en la Convención habida en 1993. Siria dispone de este tipo de medios en abundancia – especialmente Sarín, Tabún y el temible gas VX – y en los últimos meses la lucha se ha desarrollado en torno a los depósitos de los mismos. Estando, como no podía ser de otra manera, totalmente de acuerdo con esta prohibición no deja de asombrarme el cinismo que rodea todo esto. Me explico. Oigo al Presidente Obama decir que su empleo degrada la condición humana hasta el límite. Oigo a otros muchos dirigentes ahondar en lo mismo una y otra vez. Tienen toda la razón. Lo que ya no acabo de entender es que parece desprenderse de estas aseveraciones que el empleo de las denominadas armas convencionales no se encuentra en ese umbral de inmoralidad. O sea, gasear al enemigo es inmoral pero destrozarle a base de bombas es normal. ¿Hay quién entienda esto?Toda clase de muerte es horrible pero francamente creo que es mejor morir gaseado que partido en dos por la metralla de una granada de mortero. El sufrimiento no es desde luego el mismo. Todo esto es de un cinismo enorme. Todas las armas son inmorales. Dejémonos ya de una vez de ridiculeces retóricas. Tras dos años de carnicería ahora resulta que la comunidad internacional despierta – lo que está muy bien – porque se han empleado armas químicas. Y, ¿hasta ahora?¡Qué cinismo!Todo esto es un auténtico galimatías que no hay quien lo entienda. Y prueba de ello es lo que me permito transcribir copiando una carta de un lector al Financial Times que circula profusamente por internet:“Irán apoya a Assad. Los Estados del Golfo están contra Assad.Assad esta contra los Hermanos Musulmanes. Los Hermanos Musulmanes y Obama están contra el General Sisi. Pero los Estados del Golfo son pro Sisi. Lo que significa que están contra los Hermanos Musulmanes.Irán es pro Hamás pero Hamás apoya a los Hermanos Musulmanes.Obama respalda a los Hermanos Musulmanes mientras Hamás está contra los EEUU.Los Estados del Golfo son pro EEUU pero Turquía está con los Estados del Golfo contra Assad; mientras Turquía es pro Hermanos Musulmanes y está contra el General Sisi. Y el General Sisi está siendo respaldado por los Estados del Golfo”.Creo que debemos ser indulgentes y comprender la confusión de los dirigentes occidentales.

Juan Chicharro

sábado, 27 de octubre de 2012

Retirada de AFGANISTAN







Probablemente pocos españoles, incluso los que no son “victimas de la Logse” serían capaces de situar correctamente en un mapa la posición de Afganistan y tampoco conocen que la misión militar española desplegada en ese país es la mas peligrosa de nuestro Ejército y Guardia Civil, que hasta la fecha se ha saldado con 98 fallecidos; la cifra de efectivos desplegados actualmente supera los 1.500 hombres y mujeres y han pasado por allá desde 2.003 cuando comenzó nuestra presencia, unos 17.000.

Sirvan estos datos como introducción al interesante artículo del General Chicharro que nos ilustra sobre un gravísimo conflicto internacional en el que nuestro Ejército y por tanto todos los españoles, estamos implicados y que a pesar de su importancia se dedica poca atención en los medios.

F.J.


Desde el año 2003 – ya van 9 años de campaña – la OTAN, mediante la ISAF (International Security Assistance Force), lleva a cabo operaciones en Afganistán con la finalidad de asegurar un entorno seguro que permita a este país el desarrollo de una gobernanza con normalidad democrática y con la certeza de que nunca más volverá a ser santuario y sede de terroristas.

Desde esa fecha ISAF lleva a cabo operaciones militares propias de seguridad y al mismo tiempo se esfuerza en instruir y adiestrar al ejército afgano con el objetivo de que éste asuma el control y gobierno de su territorio. Son acciones que se darán por finalizadas al final del año 2014 si bien no cesará del todo el apoyo a dichas fuerzas afganas y a su gobierno pues acuerdos entre los EEUU y la propia OTAN así lo manifiestan.

La cuestión principal es que será a finales del año 2014 cuando realmente la OTAN de por finalizada su misión y se produzca la retirada definitiva de las tropas allí destacadas, incluidas las españolas.

Como ya he dicho la ISAF se constituyó en el año 2003 si bien los ataques para derribar el régimen talibán lo habían iniciado ya las fuerzas norteamericanas dos años antes tras el ataque contra las torres gemelas el fatídico día 11 de septiembre de 2001.

Esta invasión norteamericana fue acogida con funestas predicciones, avaladas por la historia, entre los medios de comunicación y eruditos que auguraban una catástrofe. Los soldados estadounidenses, se decía, no lograrían derrotar a los ingobernables afganos como tampoco habían podido los soviéticos y los británicos en el siglo XIX. La realidad fue que en apenas dos meses de ataques aéreos combinados con acciones de las fuerzas especiales lograron que los talibanes huyeran en desbandada y abandonaran Kabul.

A partir de este momento la operación se transformó en una “operación de paz”, para, como ya he dicho, crear las condiciones sociales y económicas que permitieran el desarrollo de unas instituciones democráticas estables. Sucede como tantas veces en la historia que no se tuvieron en cuenta las condiciones específicas de este país.

Afganistán no puede considerarse en su globalidad como una nación tal cual la entendemos en occidente sino que por el contrario constituye un conjunto de etnias – hasta 25 – siempre enfrentadas entre sí.

Pastunes, tayicos, uzbecos, hazaras… etc. se consideran afganos pero mantienen rivalidades irreconciliables desde siempre incluidas las derivadas del racismo que se materializan desde las clases más bajas de la sociedad hasta las élites dominantes. Esto ocasiona una fuerte desvertebración social y una falta de identidad nacional.

Es mucho lo que desde entonces ha hecho la comunidad internacional para intentar alcanzar el objetivo deseado; sin embargo, no parece claro que se hayan alcanzado los objetivos deseados. Incluso, es desesperante ver, día a día, como en el mismísimo ejército afgano se producen incidentes de extremistas infiltrados que de forma creciente amenazan la estabilidad buscada y todo parece apuntar a que el deseado ejército base fundamental del futuro país se va a ver envuelto de nuevo en luchas intestinas con orígenes tribales y étnicos.

Para salir adelante el futuro Gobierno afgano necesita ser fuerte y transparente para obtener la estabilidad y seguridad necesarias que le permitan acabar con la anarquía y la violencia imperante en el país.

No parece tarea sencilla el conseguir los objetivos marcados toda vez que hablamos de un país con un paro superior al 50% y con un PIB que proviene en un 95% de la ayuda internacional. En estas condiciones, añadidas a las mencionadas respecto al actual y futuro ejército, a todas luces insuficiente para garantizar el control del territorio, cabe pensar si los objetivos que los EEUU y la OTAN se pusieron como objetivo han sido alcanzados.

Uno tiene la impresión, a pesar de lo que se diga, que occidente ha tardado más de 10 años en constatar lo que es sin duda un fracaso o fiasco. Y ahora, ante la tesitura ya anunciada de la retirada de la OTAN se hace evidente la imposibilidad de cumplir lo deseado pues lo no conseguido en este tiempo no se va a lograr en apenas año y medio.

Cobra ahora importancia lo que tantas veces he oído a veteranos de Afganistán decir de la mentalidad afgana cuando expresaban que los nativos siempre mantenían la teoría del reloj: “para nosotros el tiempo no cuenta mientras que tú cuentas los días para irte”.

¿Qué sucederá a partir de finales de 2014 cuando la OTAN dé por finalizada su misión?

Difícil de prever pero parece claro que los talibanes mueven ficha y van paulatinamente ocupando posiciones para cuando esto suceda. Y aquí entra de lleno, de nuevo en juego, la geopolítica pues, pase lo que pase, Afganistán continuará siendo puente de unión entre Asia Central, Oriente Medio y el Sur de Asia. Una zona de gran valor geoestratégico para aquél que quiera mantener una posición dominante en Asia Central.

He aquí probablemente la razón última de los acuerdos estratégicos que los EEUU han firmado con Afganistán garantizando el apoyo al país asiático hasta el año 2024.

Las tropas de la OTAN se repatriarán pero me parece que la historia no se acaba. Esto continúa y si no al tiempo.

Escribe Juan CHICHARRO, General de Infantería de Marina.

http://www.republica.com/2012/10/22/retirada-de-afganistan_563965/