En el artículo del pasado 20 de octubre estudiaba la grave situación que atraviesa FAGOR, derivada por una parte de la crisis generalizada de consumo de electrodomésticos y por otra de su estructura empresarial cooperativa que impone un peculiar modelo de gestión muy distinto e indudablemente mucho menos eficaz que el de las empresas con las que compite en el mercado. El Grupo MCC funciona con una democracia asamblearia, lo que en la práctica lleva a una 'cooperativa' más virtual que real donde la cúspide no tiene capacidad para imponer decisiones a las distintas patas del grupo.
Manifestantes de FAGOR en Basauri, Vizcaya. |
Intencionadamente no se hizo mención en el artículo anterior a la situación política vasca y a la influencia del entorno proetarra en que se mueve el Grupo MCC. Se teme que Bildu, el partido legalizado de los partidarios de ETA, muy poderoso en las bases trabajadoras del Grupo, acuse a los gobiernos español y vasco de querer "desindustrializar Euskal Herria". Por el momento, PNV y PSOE-PSE ya han criticado la actitud del diputado general de Guipúzcoa, el bildutarra Martín Garitano, que este lunes se reunía con los alcaldes de los 8 municipios de la comarca más afectados por el cierre de Fagor.Unas 2.000 personas han recorrido hoy las calles de Basauri (Vizcaya) para reclamar una solución para los casi 2.000 cooperativistas de Fagor Electrodomésticos y Edesa, días después de que esta cooperativa haya entrado en preconcurso de acreedores.Encabezaba la manifestación una pancarta con el lema en vascuence "En defensa de nuestro empleo Fagor-Edesa".
El diario económico elEconomista publica en su número del 22 /10 / 13 un interesante artículo que reproduzco en su integridad dado que describe la situación al dia de hoy con claridad y acierto:
“La caída de Fagor desata una crisis en la cúpula directiva de Mondragón”
La presentación del preconcurso de acreedores por parte de Fagor Electrodomésticos y el posterior cierre la pasada semana de sus trece fábricas en todo el mundo ha desatado una batalla sin precedentes en la cúpula directiva de la Corporación Mondragon. Txema Guisasola, presidente del grupo, es partidario de inyectar dinero al fabricante de electrodomésticos para evitar su liquidación y el posible tsunami que podría generar en el resto de sus empresas, reforzando además la estructura societaria de la Corporación con la constitución de un holding que tuviera capacidad de decisión sobre todo el entramado industrial.Pero eso es algo a lo que se oponen de forma radical los presidentes de Caja Laboral, Txomin García; de Eroski, Agustín Markaide, y de la empresa de ascensores Orona, Xabier Mutuberria. "Su respuesta a Guisasola ha sido un no rotundo. No están dispuestos a que Fagor acabe contaminándoles a ellos también y el problema es que no se dan cuenta de que si cae puede arrastrar a toda la corporación", asegura fuentes en el entorno de Mondragón consultadas por elEconomista.Fagor necesita 110 millones de euros para poder garantizar su supervivencia y su equipo directivo ha trasladado ya a la cúpula de la Corporación que su quiebra puede tener un efecto demoledor.La compañía ha comunicado a la cúpula de Mondragón que el impacto más inmediato podría ser la desaparición de todas las pequeñas cooperativas, fabricantes e componentes y proveedoras de la empresa para la producción de electrodomésticos, que podrían acabar también en quiebra. Pero además, existe, en su opinión, un riesgo claro sobre el grupo Eroski. Con 430 millones de pérdidas acumuladas en los últimos años y un endeudamiento de más de 2.500 millones su situación puede volverse agónica, a pesar de que la deuda está refinanciada, si se desata el temor entre los acreedores tras una posible quiebra de Fagor.También se han convertido en polémicas las ayudas que el Gobierno vasco había concedido a Fagor, cuyo montante global asciende a 52 millones de euros, pero los últimos 40 millones que fueron articulados a principios de este año habrían sido concedidos de forma irregular, según denunció ayer el PSE.Ayudas del PNVLa portavoz socialista, Idoia Medía, desveló que antes de que Patxi López dejará de ser lehendakari, Fagor se les acercó solicitando fondos con urgencia para superar su crisis de liquidez, pero le denegaron las ayudas para gasto corriente y le emplazaron a asumir su reconversión.Sin embargo, según Medía, nada más llegar el PNV al poder, articularon 40 millones en ayudas de los fondos para inversiones estratégicas, Ekarpen y Socade, pero que fueron destinados a pagar los intereses de las Aportaciones Financieras (AFS) y un vencimiento de un préstamo de Polonia.
F.J. de C.
Madrid, 23 de octubre de 2.013