Técnicas Reunidas es la ingeniería española que desarrolla el sistema AIP (propulsion independiente del aire, según siglas en inglés) (*) destinado a los futuros submarinos S-83 y S-84 que les permitirá navegar dos semanas en inmersión; dicho desarrollo se ha realizado a escala 1:12 habiéndose obtenido un resultado muy satisfactorio, consistente en 300 horas de funcionamiento que equivalen a 13 días de navegación en inmersión; el éxito obtenido con estas pruebas a escala, permite emprender con optimismo la construcción del AIP a su dimensión real.
Este primer AIP operacional se instalará en el S-83, Cosme García, cuya botadura está prevista para 2024 y un año más tarde en el S-84 Almirante García de los Reyes.
Los submarinos S-81 y S-82 inicialmente se equiparán con propulsión tradicional, díesel eléctrica pasando a montar su AIP en la primera gran carena.
Como ya se tratado en anteriores artículos de este blog,(**) el proyecto de los submarinos S-80 lleva varios años de retraso por haberse producido notables y graves incidencias: fallos de diseño, sobrecostes, renuncias a tecnologías avanzadas que se incluían en los planos originales, retrasos continuos en las entregas… Pero empiezan a surgir buenas noticias: las pruebas del sistema AIP han sido “positivas” y muestran que el dispositivo es “viable”.
Los problemas encontrados durante la fase de diseño y construcción del submarino obligaron a contratar incluso el apoyo de la ingeniería norteamericana Electric Boat, del grupo General Dinamics.
Sin embargo, a la luz de las noticias mas recientes, el proyecto parece ir encaminándose hacia una consecución feliz.
Se prevé que Navantia finalice el primero de los buques en 2021, y sea entregado a la Armada a finales de ese año. Las previsiones apuntan a que, tras las pertinentes pruebas de mar y certificaciones, el submarino sea plenamente operativo en el horizonte de 2023.
A ello contribuirá el desembolso extra de 1.500 millones de euros que ha previsto el Ministerio de Defensa, lo que eleva el coste total hasta los 3.685 mill. de euros. Fondos que cubrirán el sobrecoste que han provocado los retrasos y contratiempos hallados durante la fase de producción.
Fuentes de la Armada, pertenecientes al arma submarina, aseguran que en la marina española se han recibido estas primeras noticias del avance en el sistema AIP con “relativo optimismo”. No se quiere lanzar las campanas al vuelo, pero hay quien sostiene que los S-80 empiezan a ver la luz al final del túnel.
F.J. de C.
Madrid, 12 de abril de 2.018
Notas
(*)Este sistema se basa en una pila de combustible alimentada por hidrógeno generado en base a bio-etanol, y permite básicamente que el submarino se propulse sin necesidad de obtener oxigeno de la superficie, ya sea emergiendo o mediante ‘snorkel’.
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