Mostrando entradas con la etiqueta Estrasburgo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Estrasburgo. Mostrar todas las entradas

sábado, 15 de diciembre de 2018

Estrasburgo sufre el terrorismo islámico en su popular “Mercadillo Navideño” .

Estrasburgo es una pequeña ciudad situada en Alsacia, al norte de Francia y próxima a Luxemburgo, y a otras importantes capitales de centroeuropa como Bruselas, Frankfurt, Zurich, Stuttgart como puede verse en el siguiente gráfico:


La ciudad es considerada como la capital de la Unión Europea, siendo sede de importantes instituciones como el Parlamento Europeo (cuyas sesiones plenarias se realizan en Estrasburgo), Eurocuerpo, Europol, Comisión Central para la Navegación del Rin, Corte Europea de los Derechos Humanos: Palacio de los Derechos Humanos, y otras 22 instituciones europeas como el Consejo de Europa.
Todo ello unido a la profusión  de  importantes multinacionales de los sectores  industriales, principalmente, de automoción, agro-alimentario y químico-farmacéutico, éste con importantes y numerosos centros de I+ D + I, origina una importante actividad empresarial como resultado de la cual sus habitantes, en número muy próximo a los 300.000 gozan de un elevado nivel de vida y bienestar social.
Estos días próximos a la Navidad se celebran intensamente como puede verse en el siguiente video de YouTube:


siendo  una de sus principales atracciones  el  Mercadillo de Navidad uno de los más populares y concurridos en todo el centro de Europa con  una afluencia de visitantes superior a los dos 2 millones de personas al año.

Es en este escenario donde las bandas yihadistas, tanto el Daesh (Estado Islámico) como Al Qaeda, han ordenado una ofensiva durante las fiestas navideñas contra los cristianos que ellos llaman “cruzados”, recomendando hacer coincidir sus acciones criminales con las protestas de los «chalecos amarillos» con el fin de causar una mayor desestabilización del Estado galo. El mismo martes colgaron un cartel en el que se podía ver a un «muyaidin» (combatiente) vestido completamente de negro a punto de degollar a Papa Noel y con la Cruz delante; ya en noviembre pasado, habían anunciado un atentado en Estrasburgo durante las Navidades.

Los mensajes van dirigidos sobre todo a los actores «lobos solitarios» como es el caso de Cherif Chekatt, nacido el 24 de febrero de 1989 en Estrasburgo y autor de la matanza en el mercado navideño.Yihadistas dispuestos a actuar en cualquier momento hay en toda Europa, incluida España, en una cifra imposible de calcular, pero que «es muy abultada». «La ventaja del lobo solitario es que ya está establecido en Occidente y ésa es su historia, no precisa de otra. Usa esta circunstancia como ventaja.
El terrorista y principal sospechoso fue hallado en el barrio de Neudorf, donde fue abatido por la policía a los dos dias de la masacre; inicialmente logró darse a la fuga pese a estar herido en un brazo, pues conoce a la perfección su ciudad y actuó siguiendo al pie de la letra los manuales que los cabecillas yihadistas han publicado en los últimos meses y no se le olvidó gritar en árabe «Alá es grande» para que no hubiera ninguna duda sobre sus motivaciones.
Cherif era un delincuente habitual con un amplio historial (27 detenciones y dos estancias en cárceles galas, además de otras en Suiza y Alemania). Fue ahí donde se produjo su fanatización y donde comenzó a practicar un proselitismo religioso. Esas actitudes llevaron a los servicios de inteligencia a incluirlo con una ficha «S» en su archivo de individuos radicalizados que podrían suponer una amenaza para la seguridad del Estado. Su permanencia entre rejas, como ocurre en los distintos países occidentales con individuos de este tipo, lejos de contribuir a su reinserción en la sociedad, le radicalizó hasta convertirse en un terrorista yihadista.
El atentado se produjo sobre las ocho de la tarde cerca del Mercadillo de Navidad, instalado en el centro de la capital alsaciana, produciéndose finalmente un triste resultado de cuatro muertos y una decena de heridos de diferente gravedad, alguno de los cuales está en estado crítico.
F.J. de C.
Madrid, 15 de diciembre de 2.018.



lunes, 6 de enero de 2014

Los terroristas de ETA, excarcelados gracias al beneficio de Estrasburgo no piden perdón y exigen el derecho a decidir vasco.




El sábado 4 de enero  de 2.014 se reunieron en Durango cerca de sesenta presos, asesinos convictos y confesos de ETA,  excarcelados gracias  a  la derogación de la «doctrina Parot»,( por infame sentencia del TDHde Estrasburgo),  en un acto que el Gobierno vasco permitió de buen grado, lo cual no es de extrañar y con el beneplácito de autoridad judicial, lo que si resulta cuando menos, sorprendente por no emplear un calificativo mas grueso que podría constituir desacato a la magistratura.

Los presos excarcelados, como si aún tuvieran en sus manos las pistolas, que probablemente si las tienen aunque quizá en “zulos”, exigieron ayer al Gobierno el reconocimiento del «derecho a decidir que tiene el pueblo vasco» como única vía para la «solución del conflicto» y reclamaron «repatriar y liberar hasta el último» de los exiliados y presos.

Quien expuso estas reivindicaciones, fue José Antonio López Ruiz, alias «Kubati», (sus apellidos, López y Ruiz no parecen ser de honda estirpe euscaldún) dejando claro que quienes han salido de prisión siguen perteneciendo a ETA, no se arrepienten, no piden perdón y no exigen la disolución de la banda. El «Kubati» , terrorista condenado a 1210 años de prisión por 21 asesinatos, y ya excarcelado, fue el terrorista que asesinó a la disidente etarra Yoyes cuando esta paseaba con su hijo de tres años en su pueblo natal de Ordicia.

Un ráfaga de aire fresco circuló al final de ese asqueroso “aquelarre” cuando el periodista de Intereconomía Cake Minuesa preguntó: «¿No vaís a pedir perdón a las víctimas?». El portavoz del Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK), Estanis Etxaburu, se aferró al guión del acto para contestar: «Hemos dicho que no vamos a responder a ninguna pregunta y aquí termina la rueda de prensa». Una respuesta que no contentó a Minuesa: «No teneís la hombría, la dignidad y la vergüenza de decir "queremos pedir perdón"». Poco después, dos personas de la organización obligaron al periodista a abandonar el lugar del acto.

Seguidamente me complce reproducir el artículo "El Hoyo" publicado por Ignacio Camacho en ABC en el cual glosa con su habitual buena pluma este acto.

F.J.deC.
Madrid, 6 de enero de 2.014


El hoyo

ABC
05/01/14
IGNACIO CAMACHO
El proyecto político de ETA está vivo, y los criminales, libres para perseguir los objetivos por los que han matadoLos nuestros en la calle y los vuestros en el hoyo. Con esta demoledora frase –un certero diagnóstico de situación, fuera de su crueldad extrema– recibieron la semana pasada a las víctimas del terrorismo en los valles de la muerte vascos, la geografía de la infamia donde habita el olvido de los allí asesinados con la complicidad activa o pasiva de quienes ahora gobiernan esos territorios. Y para confirmar la precisa crudeza del análisis los batasunos desplegaron ayer su viscosa e impune exhibición de fuerza: un tipo con veintiún muertos a sus espaldas, un serial killer capaz de despachar a dos decenas de ciudadanos, leyó en voz alta delante de otros 60 colegas de oficio un programa de autodeterminación con la impostada seriedad de cualquier encorbatado político nacionalista. Artur Mas debería sentir una cierta cosquilla de enojo: le ha salido un epígono llamado Kubati, al que cualquier día vemos en coche oficial con un acta de diputado.Lo que los matarifes recién liberados expusieron ayer en Durango es un discurso más profundo que el de su vulgar manifiesto soberanista. Estaban allí reunidos, con la complacencia de un juez y una Fiscalía timoratos, para dejar claro que el proyecto político de ETA está vivo aunque la banda agonice. Los muertos están enterrados y los criminales libres, dispuestos a proseguir la búsqueda de los objetivos por los que han matado. Porque ETA no mató por gusto ni por psicopatía sino por el poder y por la independencia. Y aunque ésta no la han logrado el poder ya lo tiene en sus manos a través de unos testaferros que ni siquiera han condenado los asesinatos. Ya no matan, es cierto y es importante. Pero además de borrón y cuenta nueva parecen pretender que se lo agradezcamos.A estos jiferos los vamos a ver convertidos en próceres, tiempo al tiempo. Con las capuchas quitadas se van a erigir en paladines de la independencia vasca, y eso no daría exactamente la impresión de una victoria del Estado. Estrasburgo les ha dado por cumplidas las condenas pero se están saltando un pequeño trámite de reinserción: la petición de perdón, el arrepentimiento y la repulsa expresa de su pasado de sangre y violencia. Aun con ello deberían quedar inhábiles para la política en un país higiénico, pero como mínimo tienen que cumplir ese requisito moral sin casuismos ni atajos. En vez de eso se ecochinean del sufrimiento causado y tratan de levantar un relato de dignidad sin que nadie, salvo unas víctimas estigmatizadas como si fuesen rehenes del rencor en vez de vestales democráticas, les afee sus perfiles de canallas. Habrán perdido pero la sociedad no ganará si ellos están cómodos en la derrota.Porque lo peor es que tienen razón: los suyos están en la calle y los nuestros, los de todos los ciudadanos decentes, en el hoyo. Alguna respuesta debería provocar la evidencia de que esa frase brutal es rigurosamente cierta.