La lectura del siguiente artículo del Alm (r) Alfredo Palacios en su blog
nos lleva a una traslación inmediata “mutatis mutandi” con respecto a lo que ocurrió en España hace un año aproximadamente en el caso BILDU,el partido de los terroristas de Eta, que finalmente fué legalizado mediante sentencia infame de nuestro Tribunal Constitucional, que anuló una sentencia justa del Tribunal Supremo en la que previamente había rechazado la legalizalización de dicho partido basándose en documentación fehaciente que demostraba los nexos e identidad entre los terroristas y el partido solicitante.F.J.
No a partido político de terroristas
El 22 de enero de 2010 Alfredo Crespo, abogado del cabecilla criminal Abimael Guzmán Reynoso, presentó en la “Casa del Maestro” en Ayacucho, al “Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales” (Movadef), fundado por terroristas excarcelados –30% de sus integrantes son terroristas en prisión– pidiendo la amnistía de Guzmán por considerarlo “un luchador social y un preso político”. El 29 de marzo de 2011 presentaron su inscripción como partido político ante el Registro de Organizaciones Políticas (ROP) con 164,664 firmas válidas –de 353,371 presentadas–, pero el 3 de diciembre fue rechazada por este Registro porque el seguimiento de su principio marxismo-leninismo-maoísmo-Pensamiento Gonzalo implica actos violentos contrarios a la democracia y la Constitución, sin embargo, insólita e inconcebible, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) el pasado día 12 declaró nula la resolución del ROP por no haber considerado algunos requisitos sobre el acta de fundación, estatutos y comités partidarios, pidiéndole un nuevo pronunciamiento, no considerando que el artículo 14 del Reglamento del ROB dispone que “si se detectan defectos no subsanables, la solicitud de inscripción debe ser rechazada”, lo cual es el caso, debido a que el Movadef se fundamenta en el “Pensamiento Gonzalo”, ideario político fundamentalista creado por Abimael Guzmán basado en la destrucción del Estado y la sociedad peruana para implantar un régimen totalitario empleando métodos terroristas con connotación eminentemente genocida.Este ideario –que el Movadef aduce que ha cambiado–, condujo entre 1980 y 1992 una lucha a muerte y sin tregua contra el pueblo peruano, con prédicas sanguinarias y violentas, ocasionando la muerte de más de 25,000 personas y daños materiales por más de US$ 30,000 millones. Sus acciones tendieron consciente y voluntariamente a actuar para que el conflicto interno se generalice, creando una pseudo doctrina política para transformar a un grupo de fanáticos en vehículo de autodestrucción del pueblo, y convirtiéndolos en seres sin conciencia capaces de asesinar, sin el menor escrúpulo, a miles de personas –principalmente humildes campesinos, comuneros y nativos– a través de acciones terroristas indiscriminadas, con farsantes “Juicios Populares” y sanguinarios “Pelotones de Aniquilamiento”. Bajo este panorama, es muy preocupante, y sumamente grave y peligrosa, la posibilidad que está abriendo el JNE para que el Movadef se inserte a la vida política del país. La mayoría de la población se encuentra indignada con la posición de los tres miembros del jurado que votaron declarando nula la resolución de rechazó de inscripción del Movadef –dos de ellos han pedido vacaciones–, y especialmente contra su titular, Hugo Sivina, que sin asumir su responsabilidad, se abstuvo de participar invocando que fue víctima del terrorismo.