Ejemplo de Colombia

Álvaro Uribe Vélez, presidente de Colombia, no podrá presentarse a una segunda reelección. El Tribunal Constitucional colombiano declaro nula la ley que convocaba a un “referendo constitucional” contemplado en la Carta Magna de ese país.

Elegido en 2002, la figura del presidente Uribe, ha dominado la vida política de Colombia desrrollando una importantísima y eficaz labor en todos los ámbitos del gobierno; principalmente eficaz ha sido su actuación en el campo de la lucha antiterrorista en donde ha conseguido notables exitos en su propsito de derrotar a las FARC. Prueba de ello es que despues de más de ocho años de gobierno, está en niveles máximos de apoyo y popularidad, más allá incluso, de las simpatías o antipatías políticas que suscite.

En esas condiciones, era normal y humano su deseo optar a una segunda reelección para lo cual debería producirse una modificación constitucional, sin embargo, la Corte Constitucional ha tenido la valentía y la indepencia de rechazar en un tiempo razonable, dicho proyecto de ley.
Dicha ley no era constitucional, y aquí es donde Colombia, su Corte Constitucional, ha actuado con verdadera independencia del Poder, y aquí radica el ejemplo de Colombia que da título a este breve comentario. Mientras tanto, en ESPAÑA nuestro tribunal constitucional lleva mas de TRES años estudiando lo constitucionalidad o no del Estatuto de Cataluña y se encuentra atascado por las presiones de todo tipo a las que se ve sometido; hace ya años, este mismo tribunal español se hundió en el descrédito dictando una resolución injusta para no torcer los deseos del gobierno de entonces (caso Rumsa). 

Una de las decisiones mas sabias que puede adoptar un político es saber retirarse a tiempo; debe ser muy dificil pues muchos, incluso, pretenden cambiar la ley para no marcharse. El caso de Aznar en ESPAÑA, sin embargo, resultó ejemplar en su momento, cuando en pleno ejercicio de gobierno anunció su renuncia a presentarse a unas nuevas elecciones, aun cuando en España no existe ley que lo impida.

No pensaba lo mismo Uribe en Colombia, quizá con ese sentimiento, tan humano, de creerse insustituible; pero "Don Preciso" no nació, y pronto podremos ver, ojala así sea, un nuevo presidente que sea capaz de continuar la eficaz política que Alvaro Uribe ha desarrollado con tanto éxito durante sus dos mandatos.

 

F.J.