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martes, 21 de octubre de 2014

La Organización Mundial de la Salud espera 10.000 contagios semanales de ébola en África.


África y, por consiguiente el mundo, se enfrenta al peor brote de ébola desde que el virus apareció en los años setenta, con casi 9.000 contagiados y 4.500 muertos desde diciembre del pasado año. Su velocidad de propagación ilustra la peligrosidad de un virus letal y que, en ausencia de probados tratamientos o vacunas, realmente solo se puede combatir evitando nuevos contagios.
El primer caso confirmado del actual brote de ébola que afecta a múltiples países de África -incluidos contagios hospitalarios en Estados Unidos y España- se remonta a diciembre de 2013. Tras su aparición hace diez meses en un niño de Guéckédou, zona de bosque tropical en Guinea Conakry cercana a la frontera con Liberia y Sierra Leona, las matemáticas idemiológicas han jugado claramente a favor del Ébola. En el mes de marzo, aprovechando el trasiego normal de personas en zonas fronterizas, el virus ya había entrado en Liberia, con al menos ocho casos, y en Sierra Leona, con otros seis.

Para finales de junio, este brote de ébola había contagiado a 759 personas y se había cobrado 467 muertes. Antes incluso del verano, esta epidemia ya se consideraba la peor entre la veintena de envites protagonizados por el virus desde su aparición en los años setenta. Con fecha 14 de octubre, las cifras oficiales cuantifican 8.900 contagios y 4.447 muertos. A este ritmo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte de que África Occidental se enfrenta a la tragedia de 10.000 nuevos contagios semanales en cuestión de dos meses.

1.- Al Pentágono también le da miedo el ébola y destinará 750 millones a la lucha contra el ébola.






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Un aparcamiento y una de las entradas del Pentágono permanecieron cerrados durante la mayor parte del jueves, tras encontrar “enferma y vomitando” a una mujer que reconoció haber visitado África recientemente.
La mujer se dirigía en un autobús del Departamento de Defensa hasta las instalaciones de la Armada en Washington D.C. cuando empezó a vomitar. Después de que el servicio de Bomberos de Arlington recibiera la alarma, la mujer fue trasladada al Hospital Inova Fairfax de Virginia.El responsable de Atención al Paciente de dicho hospital, considera que probablemente su única culpa sea tener una gripe y tal vez haber vuelto enferma de África Occidental. No hay más. Pero la alarma cundió.


El Pentágono prevé destinar unos 750 millones de dólares a frenar el avance del ébola en África Occidental dentro de una operación que involucra a casi 3.500 militares, informó hoy el comandante del mando estadounidense para África, general David Rodríguez. "Detener la propagación de la enfermedad es la misión fundamental", resumió Rodríguez en una rueda de prensa.
Por ello, el Departamento de Defensa ha solicitado unos 750 millones de dólares para su operación, con el objetivo de que al menos un 70 por ciento de los contagiados sean diagnosticados y puestos en cuarentena y en tratamiento. Además, según Rodríguez, casi 4.000 militares se establecerán en varios países de África Occidental afectados por el ébola para dar apoyo a los laboratorios e instalaciones donde están siendo tratados los enfermos.

El general detalló que la "mayoría" de esos militares no entrarán en contacto directo con los pacientes de ébola, dado que su labor será principalmente la de capacitar a los funcionarios de salud locales para que sepan cómo afrontar el brote. El Gobierno estadounidense anunció ayer su intención de establecer controles más rigurosos en sus aeropuertos y los de las naciones de África Occidental afectadas por el ébola, aunque sin dar detalles sobre qué protocolos se pondrán en marcha.

"Vamos a trabajar en protocolos para hacer más controles deseguridad a los pasajeros, tanto en (los países) de origen (del ébola) como aquí en Estados Unidos", afirmó el presidente estadounidense, Barack Obama.

2.- Número de reproducción.

Entre las cifras que se utilizan para describir el desastre del ébola, los especialistas se fijan especialmente en el llamado número de reproducción, que indica cuántas personas de media son contagiadas por cada enfermo de ébola. El brote actual solo podrá ser controlado cuando ese número caiga por debajo de 1. Y por ahora, el número de reproducción de esta epidemia oscila entre 1,5 y 2. Como resultado, en África Occidental los casos de ébola se han duplicado aproximadamente cada tres semanas.

Para revertir esta virulenta amenaza, la OMS se ha marcado como objetivo para diciembre lograr el aislamiento de un 70 % de los contagiados de ébola en África Occidental y conseguir el enterramiento seguro de un 70 por ciento de sus víctimas.

3.- Creciente letalidad.

En un contexto comparativo, es cierto que el virus del Ébola no es el enemigo número uno para la salud pública del continente africano. Muchísimas más víctimas mortales se están cobrando cada día la tuberculosis, la malaria, la diarrea o el SIDA, enfermedades que en su mayor parte vienen siendo tratadas con efectividad en países desarrollados.

El problema es que la propagación del ébola en África Occidental viene acompañada de un aumento significativo en su letalidad. Si durante los primeros meses de este brote, el número de muertes registradas entre los afectados se ha mantenido en un 50 %, las últimas cifras de la OMS indican que la tasa de mortalidad se ha elevado hasta el 70 %. En contraste, en una pandemia de gripe, por ejemplo, la tasa de mortalidad se sitúa habitualmente por debajo del 2 %. De cuatro víctimas mortales diarias por la enfermedad del Ébola registradas en agosto, ahora se estarían acumulando trece muertos diarios.

4.- El agravante de la pobreza.

Los muy débiles sistemas sanitarios y el analfabetismo de los tres principales países afectados en África - Guinea Conakry, Liberia y Sierra Leona-, que presentan las peores tasas mundiales de mortalidad infantil y maternal durante el parto, ayudan a explicar la amenaza agravada que supone el actual brote de ébola.

Según datos comparativos publicados por "The Economist", España -cuyo primer contagio hospitalario fue confirmado el pasado 6 de octubre- invierte una media anual de 3.000 dólares por habitante en sanidad. En contraste, Sierra Leona solamente se puede permitir 300. En la mayor parte de África Occidental, la media de gasto en la salud de sus habitantes es de 100 dólares por persona y año, en comparación a los 8.000 de Estados Unidos.

Los especialistas de la OMS han calculado que Liberia necesita el equivalente a 3.000 camas hospitalarias para tratar a sus enfermos de Ébola, cuando la capacidad actual del país es de tan solo 620. Estados Unidos -que también ha registrado al menos dos contagios hospitalarios de Ébola en octubre- dispone de una media de 245 médicos por 100.000 habitantes. Guinea Conakry, un facultativo por cada 100.000.

La falta de medios y la vulnerabilidad del personal sanitario que lucha en todos esos países de África Occidental contra el actual brote resulta heroica: con 390 contagios registrados hasta octubre y 227 muertes (incluidos los dos médicos misioneros que han fallecido en España). Una organización con máxima experiencia sobre el terreno como Médicos Sin Fronteras ha sufrido 16 contagiados entre sus voluntarios y 9 fallecidos.

5- Estados fallidos.

Por ahora, la actual epidemia de Ébola se ha concentrado en Sierra Leona, Liberia y Guinea Conakry. Y con especial preocupación se sigue el impacto del actual brote en sus respectivas capitales: Freetown, Monrovia y Conakry. La lista de países vecinos con alto riesgo de importar la enfermedad incluye a Costa de Marfil, Mali y Guinea-Bissau. Nigeria, el país más grande de África, habría registrado múltiples casos pero desde finales de agosto habría conseguido limitar contagios adicionales. El Banco Mundial ha empezado a estimar un coste económico para esta epidemia de más de 32.000 millones de dólares para finales de 2015. Y la Organización Mundial de la Salud, por su parte, ha advertido que el avance del ébola amenaza "la misma supervivencia" de sociedades y gobiernos en países de por sí extremadamente pobres y con grandes déficits de vertebración social y estabilidad política. Lo cual podría llevar a una eventual proliferación de Estados fallidos, con los consiguientes peligros para la paz y la seguridad internacional.

6- Una bola de cristal pintada de negro
Los investigadores que siguen la pista a este brote de ébola -el mayor desde la aparición de la enfermedad en 1976 en el antiguo Zaire y Sudán del Sur- se quejan de que las estadísticas oficiales están muy por debajo de la dramática realidad en África Occidental. De hecho, algunos análisis epidemiológicos barajan que por cada caso reconocido de ébola en África más de dos estarían pasando por debajo de todos los radares sanitarios. Por eso algunos expertos insisten en que los 8.900 contagios y 4.447 muertos cuantificados hasta la segunda semana de octubre pueden ser solamente la punta de un desastroso iceberg, con la sospecha de que lo exacto sería hablar de una epidemia que ya ha producido más de 20.000 contagios.
De acuerdo a un pesimista informe producido por los CDC el pasado septiembre con una extrapolación directa, si la respuesta internacional sigue siendo tan limitada como hasta ahora, África Occidental podría registrar 1,4 millones de infectados para el mes de enero.

7.- El compromiso y los reproches de Estados Unidos.

La Administración Obama se ha comprometido a desplegar más de 3.000 efectivos militares para cambiar el actual curso de la epidemia, solicitando permiso a países aliados como España para utilizar bases conjuntas en estos esfuerzos. El Pentágono se ha marcado el objetivo de construir 17 centros de tratamiento con una capacidad mínima de un centenar de pacientes por hospital de campaña. Esta infraestructura va dirigida sobre todo a Sierra Leona y Liberia, que ya ha registrado infectados en todos sus condados. Pero como reprochaba un especialista de la Universidad de Minnesota, "mientras el virus se mueve a velocidad viral, nosotros nos movemos en un tiempo burocrático". Por ejemplo, la OMS (agencia de Naciones Unidas sometida a grandes recortes en sus presupuestos) se demoró hasta agosto para declarar una emergencia de salud pública, cinco meses después de los primeros contagios internacionales registrados en marzo.

En esta crisis, la Casa Blanca se ha quejado de la falta de solidaridad internacional con África. Hasta el punto de reprochar especialmente a países como China y Rusia su pasividad ante esta virulenta amenaza.
Por todos estos fallos y responsabilidades compartidas, eminentes investigadores han denunciado en el New England Journal of Medicine que "el ébola ha llegado ya a un punto en el que podría establecerse como una infección endémica debido a una respuesta global altamente inadecuada y tardía".

8.- Colaboración económica de la Unión Europea.

"Estamos en una carrera contra reloj para luchar contra el ébola", dijo la comisaria europea de Cooperación Internacional, Ayuda Humanitaria y Respuesta a las Crisis, Kristalina Georgieva. "La CE sola se ha comprometido hasta ahora con 180 millones de euros para ayudar a los países afectados. La financiación es crucial, pero no suficiente"El primer avión saldrá el viernes con equipos de emergencia desde Amsterdam hacia Sierra Leona, indicó la CE. Los tres millones restantes se destinarán a la evacuación del personal internacional que se encuentre trabajando en África Occidental y haya sido diagnosticado con el virus del ébola.

La Unión Europea (UE) ha concedido una ayuda inicial de 4 millones de euros en favor de los países de África Occidental afectados por el brote del ébola, informó hoy la Comisión Europea (CE).

El dinero se destinará a operaciones para la ayuda al transporte aéreo, tanto de material sanitario como para la evacuación del personal internacional de Liberia, Guinea y Sierra Leona, los tres países más afectados por la epidemia.

F.J.de C.

Madrid, 20 de octubre de 2.014.