La vida política española discurre plácidamente como si en este país no pasara nada y los ciudadanos vivieran en un país maravilloso como el que Lewis Carroll dibujara para la encantadora Alicia. Aquí los cuenta cuentos de actualidad se dividen entre los optimistas del relato de La Lechera, y los pesimistas de la Caperucita Roja y el Lobo, y ambos relatos les sirven por igual al PSOE y al PP.
La versión socialista de La Lechera dice que la retirada de Zapatero le permitirá al PSOE salvar la cara en las elecciones del 22 de mayo y que luego, con Rubalcaba o con Chacón, relanzar su electorado, mientras se aparecen los brotes verdes de la economía y del empleo y con ello superarán los 150 escaños en las elecciones de 2012 y al final pactaran un gobierno de coalición con nacionalistas de CiU, PNV y CC y volverán a dejar a Rajoy otra vez y para siempre en la oposición.
La Lechera del PP parece al día de hoy más cercana a la realidad y asegura que el PP arrasará en las elecciones del mes de mayo, y especialmente en Andalucía confirmando
el hundimiento del PSOE andaluz, así como en La Mancha donde Cospedal se alzará con la presidencia de Toledo. A partir de ese momento las primarias del PSOE quedarán en un trámite para ver quién es el perdedor de las elecciones generales de 2012, y en España se levantará un clamor de adelanto electoral que ya veremos si Zapatero lo soportará.
El cuento de Caperucita Roja está más cerca de los relatos de terror, y es más propicio para la ministra Chacón a la que se puede merendar el lobo Rubalcaba disfrazado de encantadora abuelita con unos ojos y orejas muy grandes y con unas fauces todavía mayores. Si el lobo se merienda a la catalana y el PSOE ha logrado salvar los muebles en las elecciones de mayo –por ejemplo derrotando a Cospedal en la Mancha-, la fama de “feroz” irá creciendo, y en la sede del PP empezará a vivirse un tiempo de inquietud con un vaivén de encuestas que a más de uno le pondrá los pelos de punta, sobre todo porque la mayoría absoluta, en ese caso, no se verá tan clara como se aprecia al día de hoy.
A Rajoy el papel de lobo no le va demasiado, más bien le encajaría el del hombre de hojalata del Mago de Oz, pero al feroz Rubalcaba o a la ilusa caperucita Chacón los del PP les auguran un enorme descalabro a manos del cazador de Pontevedra. El hombre tranquilo del PP que, uno a uno, fuera liquidando a sus competidores en el seno del Partido Popular, desde Rato a Mayor, pasando por Aguirre y por Gallardón, o por Cascos, Pizarro, Camps y cualquier otro –Costa- que haya intentado acercarse a su sillón al frente del PP.
Rajoy es un lobo disfrazado de cordero que, nunca mejor dicho, a las caperucitas de turno las mata callando y sin pestañear. Aunque hasta que lleguemos al final del cuento el hombre tranquilo y corriente del PP tendrá a todos los suyos al borde de un ataque de nervios cuando no de una prolongada desesperación.
En realidad el cuento de La Lechera se acabará el 22 de Mayo cuando se abran las urnas y se levante el telón. El cuento de Caperucita y del Lobo Feroz quedará para la segunda parte de este año electoral, mientras crece sin cesar el número de los españoles que van desde el enfado a la indignación, preguntándose los unos a los otros que donde está ese mágico caballero blanco –que hoy no ven por ninguna parte- que los llevará con pulso firme por el camino de la salvación en ese idílico país de las maravillas que en nada se parece a la España actual.
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